Patrones
de Procesos de Gestión
Compartiendo Conocimiento para Aumentar la Productividad
Ind�ce
del Cap�tulo
3.1-. Jerarqu�a de patrones
3.2-. Patrones para dominios espec�ficos
3.2.1-. Patr�n
para cr�dito
3.2.1-. Patr�n para hospitales
3.3-. Especializaci�n
a subdominios
3-. ESPECIALIZACION
DE PATRONES
3.1-.
Jerarqu�a de patrones
El
patr�n de proceso presentado en la secci�n anterior se puede especializar
a muy diversos dominios. La especializaci�n consiste en tomar cada
uno de los componentes de Macro1, examinar su relevancia en un dominio
particular pudiendo algunos de ellos eliminarse por no ser
necesarios en tal dominio, y particularizarlos y detallarlos
para la situaci�n en cuesti�n.
La
especializaci�n es por etapas; es decir, es dif�cil pasar de Macro1
a un caso concreto y particular. Por ello se definen dominios y,
posiblemente, subdominios intermedios que permiten ir especializando
progresivamente un patr�n, antes de intentar una aplicaci�n espec�fica.
Mientras la especializaci�n se mantenga al nivel de dominios y subdominios
y no sean casos particulares se entiende que ella se
realiza utilizando dos fuentes de conocimiento: una es Macro1 que
provee estructura y descripciones de elementos y la otra es el conocimiento
espec�fico del dominio o del subdominio para establecer las mejores
pr�cticas que incluir� el patr�n. Por lo tanto, el trabajo de establecer
patrones para dominios o subdominios debe ser hecho por instituciones
universidades, centros de investigaci�n o consultoras
que tengan acceso al conocimiento se�alado. Alternativamente, varias
empresas en un dominio o subdominio podr�an colaborar en la confecci�n
de un patr�n para uso conjunto.
De
lo anterior se deduce que podemos definir una jerarqu�a de patrones
que va desde no especializaci�n en la c�spide y alta especializaci�n
a dominios y subdominios espec�ficos en la base. En la Figura 3.1
se muestra una primera versi�n de tal jerarqu�a. Obviamente, ella
se ir� conformando y enriqueciendo en el tiempo, a medida que se
tenga m�s conocimiento de los diversos dominios.
Entonces,
un usuario interesado en el uso de un patr�n para un caso particular,
deber�a tomar el patr�n para el subdominio m�s cercano a su problema
y, a partir de �l, generar un redise�o.
3.2 Patrones para dominios espec�ficos
Para
ilustrar la idea reci�n presentada, establecemos patrones para dominios
no considerados en la creaci�n de Macro1. Con ello demostraremos
dos cosas: la validez general de Macro1 para derivar patrones en
cualquier dominio que corresponda a la idea de generaci�n de un
bien o servicio y el procedimiento de especializaci�n.
Los
dominios a considerar son el de hospitales y el de cr�dito en instituciones
financieras, los cuales est�n incluidos en la jerarqu�a de la Figura
3.1.
Figura
3.2. Modelo Macro1c
3.2.1-.
Patr�n para cr�dito
En el caso de
cr�dito en una instituci�n financiera, lo que se desea generar o
"producir" es un conjunto de documentos escritura,
vale vista, pagar�, etc. que materializan la operaci�n, a
partir de un requerimiento expresado por un cliente. As�, partiendo
de Macro1, se puede generar el modelo Macro1c que se muestra en
la Figura 3.2. N�tese que, en relaci�n a Macro1, no consideramos
Administraci�n relaci�n con el proveedor, reemplazamos Planes
por Pol�ticas, ya que estos expresan mejor las intenciones
de la administraci�n superior en cuanto al cr�dito, y hacemos una
serie de peque�os cambios en los nombres para ajustarse al dominio
en cuesti�n.
En
la Figuras 3.3, 3.4 y 3.5 mostramos una descomposici�n del 1er
nivel de las actividades de las actividades Macro1c. Estos modelos
tampoco cambian mucho en relaci�n a Macro1, excepto modificaciones
obvias en los nombres, lo cual demuestra su aplicabilidad y validez.
Figura
3.3. Descomposici�n Administraci�n relaci�n con el cliente
Figura 3.4. Descomposici�n de Gesti�n,
producci�n y entrega cr�dito
Figura
3.5. Descomposici�n Producci�n y entrega cr�dito
Es
un siguiente nivel de descomposici�n donde aparecen las particularidades
del dominio de cr�dito. Esto se muestra en la Figura 3.6, donde
se descompone Venta y atenci�n al cliente. All� se muestran
las actividades t�picas de interacci�n con el cliente: Venta,
que se centra en la captaci�n proactiva de nuevos clientes; Recopilaci�n
antecedentes y an�lisis preliminar, que informa al cliente acerca
de los productos de cr�dito y requiere todos los antecedentes necesarios
para su procesamiento; y Atenci�n consultas, que absorbe
cualquier requerimiento de informaci�n sobre las operaciones de
cr�dito, por parte del cliente.
Figura
3.6. Descomposici�n Venta y atenci�n al cliente
En
la Figura 3.7 se muestra el detalle de Decidir Cr�dito, donde
aparecen dos actividades t�picas de cr�dito: Generar antecedentes
evaluaci�n, que asegura que todos los antecedentes necesarios
para decidir sobre un cr�dito est�n disponibles; y An�lisis riesgo,
que realiza una evaluaci�n formal sobre la conveniencia de otorgar
un cr�dito.
Figura
3.7. Descomposici�n de Decidir Cr�dito
Mayores
detalles acerca del modelo Macro1c se encuentran en el Anexo 2,
donde cada actividad y flujo se describen con mayor amplitud. Este
diccionario complementa al de Macro1, ya que no hemos repetido una
serie de entradas que son casi id�nticas, excepto por cambios en
nombres a las de aqu�l.
Al
igual que Macro1, Macro1c es un modelo normativo de c�mo el proceso
"deber�a" ser, con propuestas de dise�o tales como mantenci�n
actualizada de todos los estados relevantes que deben conocerse
para realizar las actividades; interacci�n y coordinaci�n entre
actividades por medio de mensajes, posiblemente electr�nicos; formalizaci�n
y estructuraci�n de actividades de toma de decisiones; introducci�n
de programaci�n de las operaciones; y varios otros que se detallan
en el modelo y su diccionario.
3.2.2-. Patr�n para hospitales
Al
partir de Macro1, es obvio que debemos considerar la producci�n
del bien o servicio que corresponde al fin de un hospital; vale
decir el servicio de sanar enfermos. En tal caso, el paciente "entra"
al proceso y es sometido a una serie de tratamientos que pretenden
sanarlo o, al menos, estabilizarlo para ser enviado a otro centro
m�dico. La idea que se desprende de Macro1 es, entonces, la que
se muestra en la Figura 3.8. N�tese que esta figura es pr�cticamente
igual a Macro1, con las siguientes especializaciones: se elimina
Administraci�n relaci�n con proveedores, por no ser relevante
el manejo de este proceso en conjunto y simult�neamente con la atenci�n
del paciente, suponi�ndose que los medicamentos y otros insumos
que se requieren estar�n disponibles; se elimina el flujo Planes,
ya que la naturaleza de la demanda aleatoria en un hospital hace
poco factible la existencia de planes operativos de mediano y largo
plazo que sirvan como referencia al tratamiento de los pacientes;
no se considera el flujo Nuevos servicios m�dicos, debido
a que, por simplicidad, se asume una baja tasa de cambio de �stos,
lo cual hace innecesario una consideraci�n expl�cita; y los nombres
de actividades y flujos han sido adaptados al dominio en cuesti�n.
Figura
3.8. Modelo Macro1h
A
un nivel m�s detallado, en la Figura 3.9, se muestra la descomposici�n
de Administraci�n relaci�n con el paciente, la cual tambi�n
es una especializaci�n de la actividad correspondiente de Macro1,
con los siguientes cambios: An�lisis demanda y uso capacidad
es una versi�n m�s restringida de la actividad original, la que
tiene como prop�sito procesar Informaci�n mercado respecto
a la demanda y An�lisis requerimientos con tendencias de
diferentes tipos de patolog�as para tomar acciones en relaci�n a
la adaptaci�n de la capacidad y establecer una Proyecci�n de
requerimientos de corto plazo, la cual se registra en Mantenci�n
estado; Admisi�n, donde se establece la situaci�n del paciente,
tanto desde el punto de vista m�dico como de capacidad de pago,
para concluir si se puede entregar el servicio o no; y los flujos
se han adaptado al caso en cuesti�n, particularmente aqu�llos que
tienen que ver con el estado y situaci�n del paciente y la disponibilidad
de recursos m�dicos para su tratamiento.
Figura
3.9. Detalle Administraci�n relaci�n con el paciente
En
la Figura 3.10. se muestra la descomposici�n de Gesti�n operaciones
m�dicas, en la cual la especializaci�n incluye: Planificaci�n
uso recursos cl�nicos, la cual, en conocimiento de los requerimientos
de los pacientes actuales y proyectados, establece planes,
pautas e instrucciones de c�mo se utilizar�n tales recursos, entre
los cuales se encuentran los m�dicos, las instalaciones para ex�menes,
los pabellones, etc.; Decidir alta o traslado, actividad
que eval�a la situaci�n de un paciente tratado para determinar si
se le da el alta o se transfiere a otra instituci�n para terminar
su tratamiento; y los flujos que han sido adaptados y detallados
para este caso.
Figura
3.10. Detalle Gesti�n Operaciones M�dicas
En
la Figura 3.11, se muestra la especializaci�n de Tratamiento
y egreso de pacientes con: Tratamientos m�dicos, que
son las intervenciones que se realizan sobre el paciente; Egreso,
que es el acto f�sico de salida del paciente del hospital; y los
flujos adaptados a este caso.
Figura
3.11. Detalle Tratamiento y egreso de pacientes
Por
�ltimo, en la Figura 3,12, se muestra el detalle de Decidir admisi�n,
donde se verifica un an�lisis de la situaci�n personal, financiera
y cl�nica del paciente, para establecer si se le trata o no.
Figura
3.11. Detalle Decidir admisi�n
Para
todo el modelo anterior se incluye un diccionario, en el Anexo 3,
que precisa las actividades y flujos indicados.
3.3-. Especializaci�n a subdominios
Uno
puede restringir la aplicabilidad de un patr�n, por medio de definir
un subdominio m�s peque�o de un dominio m�s general. Esto permite
ser m�s espec�fico en cuanto al detalle del modelo y acercarse m�s,
por lo tanto, a una posible aplicaci�n en casos espec�ficos.
La
especializaci�n de un modelo a un subdominio implica mayor precisi�n
en t�rminos de c�mo deben realizarse las actividades y flujos del
mismo, con la posible especificaci�n de pr�cticas concretas de trabajo,
reglas y algoritmos de toma de decisiones, flujos detallados de
informaci�n de estado que apoyan a las actividades, actualizaciones
espec�ficas de Mantenci�n estado, mecanismos espec�ficos
de comunicaci�n y coordinaci�n entre actividades, etc. La fuente
para estos detalles de especializaci�n son el conocimiento y experiencia
acumulados con casos que pertenezcan al subdominio, o de casos del
dominio u otros dominios, cuyas pr�cticas sean extrapolables a aqu�l.
Por ejemplo, en el dominio de manufactura una pr�ctica universalmente
aceptada como deseable es la del manejo integral de la cadena log�stica,
con la idea de funcionar bajo el concepto de just in time
donde cada elemento y actividad necesaria en la manufactura
se genera o realiza en el momento en que es necesario, eliminando
con esto inventarios excesivos, demoras, interrupciones y, en general,
cualquier desperdicios de recursos, y contribuyendo a acelerar el
proceso productivo. Esta misma idea est� presente en Macro1 y puede
extrapolarse a dominios y subdominios que no sean el de manufactura.
As�, en el caso de atenci�n de urgencia en un hospital, es claro
que el manejo integral de la cadena de tratamiento del paciente
y, en particular, la idea de just in time parecen apropiadas
para asegurar que el paciente fluya sin demoras, interrupciones
o dificultades en su paso por el hospital y que cada recurso necesario
para ello est� disponible en el momento en que se necesita. Muchas
de las pr�cticas de manejo integral de la cadena log�stica son,
entonces, aplicables al subdominio de atenci�n de urgencia; en particular,
registrar y conocer la situaci�n del paciente en todo momento usando
c�digo de barras, por ejemplo; programar el uso de cada uno de los
recursos escasos pabellones, rayos X, scanners, etc.;
y adelantarse a los requerimientos de insumos e implementos necesarios
para realizar una intervenci�n.
Nuevamente,
es dif�cil mostrar c�mo se genera un modelo para un subdominio,
ya que es, necesariamente, una tarea que involucra el an�lisis de
muchos casos y fuentes de informaci�n que proveen conocimiento acerca
de mejores pr�cticas. Por lo tanto, s�lo ilustraremos la especializaci�n
a un subdominio por medio de una instancia espec�fica, cual es un
patr�n para cr�dito hipotecario en el caso en que existe la producci�n
de letras para financiarlo*.
El
punto de partida es el modelo patr�n para el dominio de cr�dito
Macro1c, el cual debe detallarse. Como el cambio de un dominio a
un subdominio es b�sicamente por adici�n de detalles, todo lo documentado
para el primero es v�lido para el segundo y no se necesita repetirlo.
Por lo tanto, s�lo es necesario entregar niveles de descomposici�n
adicionales respecto a Macro1c y las correspondientes descripciones
del diccionario.
Lo
anterior se presenta en las Figuras 3.13 a 3.18. As�, en la Figura
3.13 se entrega la descomposici�n de Recopilaci�n de antecedentes
y an�lisis preliminar, donde los detalles m�s relevantes son
la existencia de una instancia preliminar de evaluaci�n del cr�dito
para darle una respuesta r�pida al cliente y la generaci�n y manejo
de carpetas f�sicas o electr�nicas que contienen antecedentes no
registrables en Mantenci�n de estado.
Figura
3.13. Descomposici�n de Recopilaci�n antecedentes y an�lisis
preliminar
En
la Figura 3.14 se muestra la descomposici�n de Decidir cr�dito
y en la Figura 3.15, la de Generar antecedentes evaluaci�n,
que contienen actividades necesarias en cr�dito hipotecario, como
asegurar que el bien a hipotecar no tenga problemas legales y realizar
una tasaci�n para conocer su valor en el mercado, incorpor�ndose
los antecedentes que se generan a la carpeta del cliente.
Figura
3.14. Descomposici�n de Generar Antecedentes Evaluaci�n
Figura
3.15. Descomposici�n Generar antecedentes evaluaci�n
En
la Figura 3.16 se muestra la descomposici�n de Programaci�n operaci�n,
siendo lo m�s relevante en cuanto a �sta la existencia de actividades
expl�citas de Asignar requerimientos, lo cual genera un programa
de actividades de producci�n, que establece qui�n estar� a cargo
de cada operaci�n, las prioridades de ejecuci�n y las fechas esperadas
de t�rmino; y de Controlar producci�n, para asegurar que
el cr�dito se produce de acuerdo a plazos y otras condiciones preestablecidas.
Figura
3.16. Descomposici�n Programaci�n Operaci�n
En
la Figura 3.17 se muestra la descomposici�n de Producci�n cr�dito,
en la cual se muestran las t�picas e indispensables actividades
asociadas a la generaci�n de un cr�dito hipotecario.
Figura
3.17. Descomposici�n Producci�n Cr�dito
Por
�ltimo, en la Figura 3.18, se muestra la descomposici�n de Entrega
cr�dito, donde se generan los documentos que materializan el
cr�dito y se produce la entrega f�sica del mismo.
Figura
3.18. Descomposici�n Entrega Cr�dito
Mayores
detalles aerca de las actividades y flujos de las figuras anteriores
se muestran en el diccionario del Anexo 3.
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